miércoles, 25 de agosto de 2010

Champions League: Ronda previa


Noche de emociones, de buen juego, de tensión y de nombres propios la vivida anoche con la ronda previa de la Liga de Campeones que nos dejó los cinco primeros clasificados para el sorteo del próximo viernes. Son los siguientes: Partizan, Braga, Basilea, Werder Bremen y Hapoel Tel Aviv.
Las mayores emociones se vivieron en el partido más esperado, el Sampdoria-Werder Bremen. Los alemanes llegaban con la ventaja del 3-1 conseguido en casa, sin embargo, en trece minutos lo tiraron por la borda, ya que Pazzini primero de cabeza tras un gran centro de Cassano, y después con una sensacional volea, dio la vuelta a la eliminatoria. El Bremen no estaba sobre el campo e incluso pudo recibir algun gol más antes del descanso, ya que un nuevo cabezazo de Pazzini fue repelido bajo la línea de gol y Wiese detuvo un mano a mano a Cassano, que jugó un gran partido.
Tras la reanudación no se producirían grandes cambios, así que Schaaf reaccionó dando entrada a Arnautovic por Borowski. Sería el joven fichaje el que tendría la primera gran ocasión con un potente disparo que se marchaba alto por muy poco. Después entraría Rosenberg, jugador con un pie fuera del equipo según los rumores. Sin embargo el gol llegaría de nuevo del lado local, y sería Cassano el que no anotase, para felicidad suya y de todo el estadio, que tocaba la clasificación con las manos. De ahí que Cassano fuese sustituido entre aplausos, para nada se imaginaba lo que ocurriría poco después.
Y es que Werder Bremen ha demostrado muchas veces jugar hasta el final de acuerdo a su forma ver el fútbol y con una jugada aislada en el minuto 93 Marcus Rosenberg ajustó el balón al palo derecho Curci que nada pudo hacer. Con ese resultado se llegaba a la prórroga. Una prórroga marcada por la figura de Marko Marin, el habilidoso jugador se echó el equipo a la espalda y los alemanes mostraron mejor condición física que su rival, que no pudo hacer otra cosa que observar el vendaval de juego. Marin tendría una gran ocasión al estrellar un disparo en la escuadra, después lo intentaría de nuevo con una internada por banda izquierda, pero sería Claudio Pizarro el que diese a su equipo la clasificación con un disparo seco y raso desde la frontal. En esos momento la Sampdoria estaba muerta y nada pudo hacer para evitar esta dolorosa clasificación.
No menos dolorosa fue la forma de caer del Anderlecht, que llegaba con un 2-2 favorable conseguido en Serbia, en campo del Partizan. Sin embargo al cuarto de hora de juego, un buen remate de cabeza de Cleo daba ventaja a los serbios. Resultado poco merecido ya que todo el fútbol lo habían puesto los locales, que lo seguirían intentando hasta el descanso, con buenas maneras pero sin acierto. Con Biglia dirigiendo el juego y con Lukaku intentándolo de todas las formas posibles el equipo llegó al segundo tiempo sin conseguir marcar. Y por si fuera poco, un error en defensa dejaba a Cleo libre de marca para anotar su segundo tanto y poner más difícil la remontada.
No obstante, Lukaku solo tardaría diez minutos en reducir distancias de cabeza. Cabe destacar la cantidad de ocasiones que es capaz de fabricarse a lo largo de un partido gracias a la facilidad que tiene de desmarcarse o de rematar, ya sea con un fuerte disparo, de cabeza o de chilena.
Después, a veinte minutos del final, Gillet conseguía igualar la eliminatoria con una espectacular volea desde fuera del área tras acomodarse el balón con un buen control. El Anderlecht era muy superior y el Partizan no podía parar su juego. La polémica llegó con un gol anulado a Lukaku por un fuera de juego inexistente y que habría dado la clasificación a los suyos. Además el delantero vio la amarilla por quitarse la camiseta al celebrar el tanto.
Como nadie marcó se llegó a la prórroga, y durante esos treinta minutos tampoco habría goles, en gran parte por el cansancio de los jugadores que se dejaba notar. En la tanda de penaltys veríamos como Suárez, Biglia y Boussoufa mandaban el balón a las nubes, y de nada servirían las dos paradas de Proto, ya que el Partizan se acabaría clasificando.
La gran sorpresa de la noche la dio el Braga al eliminar al Sevilla con todo merecimiento, el equipo supo a la perfección cuando y como defender y sobre todo cuando y como atacar, con rápidas contras que el Sevilla no supo parar, de ahí que encajasen cuatro goles en un partido que tendría que haber significado una remontada. Los de Álvarez mostraron un juego lento y previsible que no inquietó a los portugueses, a pesar de que Luis Fabiano y Navas pusieron el 2-2 a falta de diez minutos. Después Kanouté recortaría distancias de nuevo para dejar el 3-4 definitivo.
En los otros partidos, el Basilea tuvo la eliminatoria más plácida de todas a priori al vencer por 0-3 en campo del Sheriff Tiraspol, sin embargo el primer gol no llegaría hasta el minuto 74, obra de Streller, después llegarían dos más de Frey, de nuevo importante para su equipo.
Por última mencionar la clasificación de los israelíes del Hapoel, que a pesar de empezar perdiendo con el Silva Douglas en propia puerta, supo mantener la calma e incluso empató el partido en los últimos instantes por medio de Zahavi.

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