lunes, 1 de junio de 2009

Resumen mayo I

Después de varias semanas sin escribir aprovecharemos estos días sin fútbol para comentar lo sucedido en el mes de mayo y así centrarnos en los partidos de clasificación para el mundial, la ya cercana Copa Confederaciones y por supuesto la Copa Libertadores que aunque estará parada dos semana animará este final de primavera ya sin campeonatos europeos. También habrá tiempo para hablar del clausura argentina, donde la revelación, Huracán, con los geniales Pastore y De Federico intentará batir al líder Lanús y a Vélez, ambos con paso firme hacia el campeonato.

Comenzaremos este repaso con el Werder Bremen y sus dos finales disputadas. El 20 de mayo en Estambul se jugó la última final de la UEFA, que enfrentó al equipo alemán y al Shakthar Donetsk con sus cinco brasileños formando la línea de ataque. Se vio un partido en el ningún equipo mostró su verdadera cara de juego ofensivo, los de Bremen quizá por la imposibilidad que causó la baja de Diego, además no se vieron las habituales subidas de los defensas o las llegadas de Frings. Por parte ucraniana el equipo jugó de manera muy irregular, por fogonazos, que eso sí, crearon siempre peligro a la alta muralla germana.

El Bremen comenzó mejor, bien asentado en el campo y con la idea de no perder el balón en zonas comprometidas. Sin embargo, la idea propuesta de no dejar huecos atrás, como se suele ver en la Bundesliga, se rompió con un balón interior entre los centrales que con fortuna le llegó a Luiz Adriano que batió a Wiese picando el balón cuando el meta ya estaba en el suelo.
Los de Donetsk al adelantarse en el marcador se echaron unos metros atrás, y aunque la profundidad del juego alemán era nula, supieron aprovechar sus virtudes, con alguna diagonal de Özil y balones aéreos a Pizarro y Almeida. Y gran parte de sus posibilidades pasaban por las jugadas a balón parado, así Naldo haría el empate con una falta en la frontal que Pyatov no supo despejar.
El encuentro marcharía igual en los minutos restantes, con ocasiones para ambos equipos, algunas muy claras que no sirvieron para romper el empate. De esta manera se llegó a la prórroga en la que el cansancio se dejó notar, sobre todo en algún jugador del equipo ucraniano, como fue el caso de Ilsinho. Y para estos momentos deben aparecer los jugadores con experiencia, los que siempre cumplen y aunque lleve cien minutos sobre el campo es capaz de subir desde el lateral derecho, ese fue Corluka, que llegó hasta la línea de fondo y con un pase hacia el punto de penalty dio el balón en bandeja a Jadson, que aunque no pegó al balón con demasiada potencia pudo batir a Wiese para llevar a las vitrinas de Donetsk la última UEFA de la historia.

En los minutos finales el Bremen lo intentó con balones largos y todo pudo cambiar con un penalty sobre Pizarro por un claro agarrón que el colegiado español Medina Cantalejo no apreció.



La buena noticia para el Bremen era la nueva final que disputaría diez días después. El pasado sábado en Berlín se jugaría la final de la DFB Pokal ante el Bayern Leverkusen. La situación de ambos equipos en la Bundesliga fue mala, noveno y décimo, así la consecución de la Copa sería una buena forma de acabar la temporada. Diego esta vez sí jugaría, y jugó el que fue su último partido con la camiseta verdiblanca para marcharse a Turín.

Ambos equipos tenían a sus mejores jugadores disponibles, y así formaron con sus onces ideales. El encuentro sería muy igualado, con ocasiones para ambos equipos y con el Bremen con la lección aprendida de lo sucedido, esta vez la defensa no cometió ningún error, también es cierto que la delantera del Lverkusen no creó tantos problemas como lo hizo la habilidad y la técnica de los brasileños en Estambul.

Diego comenzó muy participativo pero menos acertado que de costumbre y Pizarro y Almeida creaban peligro en la portería de Adler. Barnetta y Helmes tuvieron las mejores ocasiones por parte del equipo de Labbadia.

Tuvimos que esperar al segundo tiempo para ver el único gol del partido, fue en una arrancada de Diego que se marchó de dos defensores y al ver como se le venía encima el tercero abrió el balón a banda izquierda, donde se internaba Özil y con un fuerte disparó hizo inútil el intento de Adler.

El resto del partido fue bastante tranquilo y los de Bremen no pasaron apuros para llevarse el partido a pesar de la entrada al campo de Charisteas y Kroos en los últimos instantes.

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